20 de octubre de 2010

CHICAGO ME PERMITIO VOLVER AL FUTBOL PROFESIONAL

El 10 de mayo de 1992 quedará grabado a fuego en la historia del protagonista de esta semana. Ese día se desvanecieron sus sueños por cuidar los palos del arco “Millonario” Un inesperado protagonista asumió un rol que no le correspondía, cinco expulsiones, una goleada en contra y sus caminos que lo llevaron a una Liga en el Interior de la provincia de Buenos Aires (Lincoln). Luego su suerte y la de Chicago se cruzaron. El protagonista es Rodrigo Luis Tomás Burela (nacido en Junín el 12 de octubre de 1971).
Se lo notaba sereno, cansado por sus diversas actividades que se suma a la llegada de posprimeros calores. Es el entrenador de arqueros de la Primera División en Sarmiento, trabaja con los juveniles y tiene su propia escuela de arqueros, donde 28 pibes dejan volar sus ilusiones.

Si se pretende notarlo alterado, solo alcanzaron decir un nombre y un apellido: Javier Castrilli “yo no lo puedo nombrar, fue determinante en mi carrera. Su intenciones de protagonismo le sirvió para estar hoy en televisión, para haber sido parte del gobierno. El quería marcar que era distinto, veníamos con un referato permisivo y solo él quería marcar la diferencia avalado por un sector del periodismo” Y es tanto lo que le molesta recordar a quien dirigió aquel bochornoso River 0 Newell`s 5, cuando entre los 5 expulsados estaba Comizzo y Burela debutó en la Primera del “Millonario” en un partido atípico, que recuerda otro hecho, jugando para Lanús contra Vélez “me cobró seis segundos!!! Solo nos lo cobraron a mí y a Bonano, cuando Tilger le hizo el gol jugando para Unión. Es un tipo que quiso ser protagonista, mostrarse diferente y no le hizo bien al fútbol ni al referato

Tras su salida de River llegó a Rivadavia de Lincoln, estando allí surge la posibilidad de llegar a Chicago “era todo o nada, me iba bien en Chicago y regresaba al fútbol profesional en Capital o desaparecía

Es por eso que no oculta su sentimiento por Chicago “me hizo muy bien por todo lo que representa futbolísticamente hablando y como Club, me dio la posibilidad de ir a Talleres y después volver a Primera División con Lanús

Jorge Ciancaglini había tenido una gran temporada, su destino era Banfield, Chicago necesitaba dos arqueros, uno era Rodrigo, llegaría otro con más nombre “yo llegué primero, después vino Claudio Romero que era suplente de Scoponi en Newell`s. El tercer arquero era un pibe del Club, Marcelo Elizaga

Finalmente Rodrigo se queda con expuesto y recuerda aquel mal comiendo “era un torneo durísimo, estaban los tres cordobeses, los dos tucumanos, Colón … no empezamos bien, llegó Rodolfo Motta, metimos varios resultados y terminamos clasificando al octogonal” Aquel octogonal que nos enfrenta con Talleres, 2 a 2 en Mataderos y 0 a 0 en el Barrio Jardín con el discutido arbitraje de Lis Olivetto.
Gustavo Conte, Luis Santillán, Gabriel Medina, Fabio Almirón, Rodrigo Burela y Aroel Almeyda; Lucio Ramos, Roberto Leiga, Héctor Sánchez, Christian Gómez y Gustavo González

El mundo del fútbol lo llevó por Talleres, Quilmes, Gimnasia y Esgrima La Plata, Atlético Rafaela… En estos últimos dos clubes no tuvo continuidad, porque en el Lobo estaba un más que afianzado Juan Carlos Olave y en la “Crema” surgía brillante Marcelo Barovero. Por eso el regreso a su Ciudad “eran tiempos de mirar a la familia, los chicos en edad escolar, mi mujer que es de Junín, no había a la vista clubes para seguir en el Nacional B y opté, con 33 años, jugar en Sarmiento

Le pedimos entonces, por haber estado en los dos lugares, que Nos de un pantallazo de aquellas cosas que los asemejan a unos y otros y qué lo diferencia “Chicago no pertenece a esta categoría, supo estar mucho más arriba. Sarmiento fue protagonista en los últimos cuatro campeonatos. Son dos grandes con expectativas de ascender

Va un poco más allá ingresa a la idiosincrasia del juego “a todos les interesa ganar, pero el hincha de Sarmiento también pretende que se juegue bien, que haya buen trato de la pelota. En Chicago, sobre todo cuando yo estaba, no alcanzaba solo con jugar bien, era necesario correr y meter todo el partido

En el cierre nos deja un concepto sobre Nueva Chicago “un Club muy importante, una gran vidriera, un lugar ideal para todo aquel jugador que quiera probarse para qué está en el fútbol y con una hinchada fabulosa
Julio Cordara