9 de octubre de 2010

SIGUIENDO LA LUNA

A partir de la zurda de Damián Luna, con un equipo que fue un equipo, que se mostró corto, compacto y solidario y le sumó la convicción para lastimar cuando existió la oportunidad. Chicago goleó a San Telmo en una tarde letal de Leonardo Carboni.

SINTESIS
Nueva Chicago: Agustín Gómez; Adrián Scifo, Ariel Coronel, Matías Escudero (PT '43 Gonzalo Rocaniere) y Darío Arias; Julio Serrano y Rodrigo Pepe (ST '34 Roberto Bochi); Pablo Ruiz, Damián Luna (ST '21 Leandro Cogrossi) y Agustín Domenez; Leonardo Carboni. DT: Mario Finarolli
Suplentes: Daniel Monllor, Mauro Brizuela, Jorge Pérez y Leonardo Ramos

San Telmo: Juan Ferreyra; Maximiliano Seevald, Julio Caldiero, Carlos Inda (ST '4 Víctor Gauto) y Walter Gómez; Sergio Santúa, Alexis Brizuela (ST '00 Carlos Ramos), Facundo Coyra y Mariano Díaz; Jorge Echenausi y Pablo Rodríguez (ST '00 Ricardo Segundo). DT: Gerardo Reynoso

Suplentes:Juan Gambandé, Carlos Ojeda, Jonathan Dizeo y Adrián Acevedo
Goles: PT '12 Carboni (CH); ST '7 Luna (CH), '11 Echenausi (ST), ' 23 y '32 Carboni (CH)
Amonestados:Ruiz, Pepe y Serrano (CH); Gauto (ST)
Expulsado: ST '36 Caldiero (ST)
Arbitro: Nicolás Lamolina
Asistentes: Nº 1 Juan Galeano y Nº 2 Miguel Baldonado
Cancha: Nueva Chicago

COMENTARIO
"Siguiendo la luna no llegaré lejos, tan lejos como se pueda llegar" Contradiciendo a Los Fabulosos Cadillacs, Chicago, siguiendo el (gran) juego de Damián Luna construyó su mejor actuación en el Torneo.

Sigue la canción "las cosas que dije no tienen sentido..." Una semana atrás hablábamos de un equipo mal parado, desequilibrado y con grandes fallas individuales. Hoy esa imagen cambió, para ello, varios jugadores levantaron ostenciblemente su nivel, con movimientos que hicieron un conjunto compacto, más corto. Fue importante lo de Scifo y Arias por los costados y el funcionamiento de Pepe (gran partido) y Serrano. Eso fue lo que determinó la solidez defensiva.

"Vamos mi cariño que todo está bien, que esta noche cambiaré, te juro cambiaré..." Y cómo no creerle esta vez. Cuando Finarolli, ante la ausencia obligada de Ferrer (por lo menos tres semanas afuera), dejó como única referencia de área a Carboni. En la semana lo había pensado "ganable" por afuera. Para eso ubicó bien en los extremos a Ruiz y Carboni, dejándole a Luna una doble función: ser el media punta que aproveche los movimientos de Carboni, así tomó el rebote en el arquero para poner el segundo o como enlace, para aprovechar la fineza de su pegada (gran habilitación a Carboni en la apertura del marcador, que el "nueve" definió con un tremendo zapatazo de zurda).

Vale aclarar que enfrente no hubo un equipo que viniera "a colgarse del travesaño", Reynoso lo había pensado peleado en el medio para salir rápido de contra. Sólo hubo diez minutos en el que el "Candombero" manejó la pelota y ganó en el terreno. Fue tras el descuento de Echenausi y hasta el tercer gol de Chicago, cuando Carboni aprovecha una falla de Caldiero para estirar la diferencia.

Por qué Chicago en la mayor parte del encuentro "ganó la media cancha" tiene que ver el funcionamiento del "doble cinco" pero también los movimientos compactos. Cuando defendían se convertían en línea de seis y cuando Chicago atacaba, para que no se repitiera lo de Atlanta (y tantas otras veces) que lo agarraban de contra mal parados, Scifo y Arias se convertían en volantes externos, ocupando la mayor cantidad de espacios.

Hubo tiempo para el toque que le dejara a la gente gritar "ole", aunque era solo retención de pelota sin profundidad. Esto hasta que en un momento Ruiz no tuvo toque hacia atrás, encaró y le ganó a dos, jugó para Domenez, quien dentro del área grande llegó a la línea de fondo, para asistir a Carboni, quien la empujó al gol sellando una gran jugada colectiva.
Hubo muchos aplausos para Luna cuando salió reemplazado. Hubo ovación para Carboni, el último en irse del campo de juego en su gran tarde, a la que le puso gol a su enorme sacrificio

Julio Cordara